El Observatorio de Rayos X Chandra de la NASA, junto con otros telescopios, ha identificado un agujero negro supermasivo que ha desgarrado una estrella, utilizando posteriormente los restos estelares para crear erupciones de rayos X detectadas en su vecindad. Esta investigación conecta dos fenómenos cósmicos: los eventos de disrupción de marea (TDE) y las erupciones cuasi-periódicas (QPE), arrojando luz sobre los entornos que rodean a los agujeros negros masivos.
El estudio comenzó en 2019 cuando un telescopio óptico en California observó una explosión de luz clasificada como un TDE, llamado AT2019qiz. Este evento ocurre cuando las fuerzas de marea de un agujero negro desintegran una estrella cercana. Al mismo tiempo, los astrónomos rastrearon breves y regulares erupciones de rayos X cerca de agujeros negros supermasivos, denominadas QPE.
Los hallazgos recientes sugieren que las QPE podrían resultar de objetos que colisionan con el disco formado por los TDE. Observaciones de Chandra y Hubble en 2023 revelaron un patrón de erupciones de rayos X de AT2019qiz, que ocurren aproximadamente cada 48 horas, confirmando así la conexión entre TDE y QPE.
Las implicaciones de esta investigación son significativas para futuros estudios astronómicos, ya que la identificación de más QPE podría ayudar a medir la prevalencia y las distancias de los objetos en órbita alrededor de agujeros negros supermasivos. Tales hallazgos también podrían mejorar los objetivos para los futuros observatorios de ondas gravitacionales.
Los resultados de este estudio están detallados en la edición del 9 de octubre de 2024 de la revista Nature, liderada por Matt Nicholl de la Universidad de Queen's en Belfast.