Un estudio reciente de la Universidad de Washington ha demostrado que los mosquitos hembra de la especie *Aedes aegypti* se sienten atraídos por colores específicos, como el rojo, el naranja, el negro y el cian, después de detectar dióxido de carbono (CO₂), un componente presente en el aliento humano. Este hallazgo sugiere que los mosquitos utilizan señales olfativas y visuales para localizar a sus huéspedes.
Los investigadores observaron que, en ausencia de CO₂, los mosquitos no mostraban preferencia por ningún color en particular. Sin embargo, al introducir CO₂ en el entorno, los insectos se dirigían hacia los colores mencionados, mientras que ignoraban otros como el verde, el azul, el blanco y el morado. Este comportamiento indica que la combinación de señales olfativas y visuales es esencial en la búsqueda de alimento por parte de los mosquitos.
La piel humana, independientemente de su pigmentación, emite una señal visual en tonos rojizos y anaranjados, lo que podría explicar la atracción de los mosquitos hacia estos colores. Los investigadores sugieren que este conocimiento podría ser útil en el desarrollo de estrategias para prevenir las picaduras de mosquitos, como el diseño de ropa o trampas que utilicen colores menos atractivos para estos insectos.
Este estudio aporta una comprensión más profunda de cómo los mosquitos localizan a sus huéspedes y abre nuevas vías para la prevención de enfermedades transmitidas por estos insectos, como el dengue, la fiebre amarilla y el zika.