Firenze, 11 de octubre de 2024 - La salud mental en Toscana presenta un panorama preocupante, con un aumento del malestar psicológico entre jóvenes y adultos, mientras que el acceso a los servicios de apoyo sigue siendo limitado. Esto se desprende del último informe de Ars, la Agencia Regional de Salud de Toscana, fechado en febrero de 2024, que proporciona una visión general del estado de salud mental de la población y el uso de servicios locales.
Según el informe, el 36% de los adolescentes (de 14 a 19 años) sufre de malestar psicológico, caracterizado por ansiedad, frustración y estados de ánimo negativos. Esta cifra ha aumentado del 21,5% registrado en 2018, con un impacto más evidente entre las chicas. Sin embargo, a pesar de esta creciente condición de malestar, el uso de los servicios de salud mental entre los adolescentes ha disminuido.
La situación no es mejor para la población adulta. En 2021, solo 31,250 toscanos de entre 20 y 64 años accedieron a los servicios de salud mental al menos una vez, en comparación con los 37,749 de 2019. Los diagnósticos más comunes se refieren a trastornos neuróticos y psicosis, pero se observa una disminución general en el uso de la atención. La población anciana no está exenta de problemas de salud mental. Entre los mayores de 65 años, la tasa de acceso a los servicios de salud mental cayó de 13,8 por 1,000 residentes en 2019 a 10,8 en 2021.
Paralelamente, el uso de medicamentos antidepresivos está en aumento: Toscana confirma su posición como la región con la dosis media diaria más alta en comparación con la media nacional. El informe de Ars destaca que Toscana tiene el mayor consumo de antidepresivos en Italia. La dosis media diaria de medicamentos, según datos de 2022, es de 67,6 dosis por 1,000 residentes, frente a una media nacional de 45,8 dosis por 1,000 residentes. Además, la prevalencia de toscanos en tratamiento regular con antidepresivos (definida como al menos 6 recetas en el año) se sitúa en el 3% entre los 18 y 64 años y en el 10,6% entre los mayores de 65. Este dato confirma una tendencia constante en el uso de antidepresivos, que se ha mantenido prácticamente estable en los últimos 10 años, con una prevalencia mayor entre las mujeres, tanto en términos de diagnósticos como de adherencia al tratamiento.
Desde el 16 de septiembre de 2024, el servicio de psicólogo de base, que podría ayudar a mejorar la salud mental de los toscanos, está activo en todas las Asl toscanas. El objetivo es interceptar de manera temprana y prevenir la cronicización o formas agudas de malestar psicológico, que pueden surgir, por ejemplo, de un duelo, la pérdida de un empleo, un diagnóstico de enfermedad o en el ámbito de la prevención y educación para el cuidado y el bienestar. Se trata de un primer nivel de asistencia para luego, si es necesario, dirigir al paciente a un especialista, y serán los médicos de familia y pediatras quienes solicitarán la visita y la atención del psicólogo de base.
El psicólogo de base recibirá la solicitud y, una vez que haya asumido al paciente, será responsable de desarrollar un programa de apoyo psicológico con el objetivo de interceptar de manera temprana el malestar y actuar de manera oportuna sobre los problemas psicosociales del paciente.
Por el momento, hay ocho psicólogos de base en Toscana, de los cuales tres son para la Asl Toscana centro. El servicio ya está activo en Florencia en las casas comunitarias 'Morgagni' y 'Le Piagge', mientras que a partir del 30 de octubre de 2024 comenzará también en el centro 'Dalla piccola'.
Tres psicólogos de base trabajarán en la Asl Toscana sudeste: en la casa de salud Arca di Fontebecci en Siena, en la casa de salud San Giovanni Valdarno en la provincia de Arezzo y en el Cot de Orbetello en la provincia de Grosseto, donde la figura estará presente tres días a la semana.
En la Asl Toscana noroeste, los dos psicólogos reclutados estarán operativos en la casa comunitaria de Querceta, todos los días de lunes a sábado.