La crianza siempre es un viaje lleno de desafíos. Cuando su hijo tiene un trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), esos desafíos pueden tomar formas únicas que requieren paciencia, comprensión y flexibilidad adicionales. Pero con el apoyo y la información adecuados, estas experiencias también pueden abrir la puerta a una conexión más profunda con su hijo.
El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo que afecta al cerebro y al sistema nervioso. Según un estudio que utilizó datos de la Encuesta Nacional de Salud Infantil de 2022, más del 10 por ciento de los niños estadounidenses de entre tres y 17 años tienen TDAH.
Si cree que su hijo puede tener TDAH, su primer paso debe ser concertar una cita con su médico. Ellos le preguntarán a usted y a su hijo sobre la salud, el comportamiento y la actividad de su hijo, así como sobre los síntomas de TDAH que ambos han notado. También realizarán un examen médico para descartar otras posibles causas de los síntomas y verificar otras condiciones comunes asociadas con el TDAH.
Una vez que a su hijo se le diagnostique TDAH, aprenda tanto como pueda sobre la condición. Los recursos en línea confiables incluyen los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y la Asociación de Trastorno por Déficit de Atención.
También es importante comprender el diagnóstico específico de su hijo y cómo afecta su vida diaria, tanto en casa como en la escuela.
Aprender sobre el TDAH le ayudará a tomar decisiones informadas sobre las mejores opciones de tratamiento para su hijo. La Academia Americana de Pediatría recomienda una combinación de medicamentos y terapia.
Estimulantes, que ayudan a aumentar el enfoque y la concentración
No estimulantes, que mejoran la atención y la memoria y no tienen los efectos secundarios de los estimulantes
La forma de terapia más comúnmente utilizada para tratar el TDAH es la terapia conductual. Enseña a un niño cómo monitorear su propio comportamiento y ajustarlo cuando sea necesario.
Los niños con TDAH pueden calificar para servicios de educación especial públicos gratuitos bajo una de dos leyes federales. Si el TDAH afecta la capacidad de aprendizaje de su hijo, puede ser elegible para un Programa de Educación Individualizado (IEP) bajo la Ley de Educación para Individuos con Discapacidades (IDEA). Si no califica para un IEP, aún podría recibir adaptaciones especiales bajo la Sección 504.
Además de la terapia profesional, también es importante que los padres aprendan técnicas de terapia conductual para que puedan usarse en casa.
La terapia conductual tiene dos principios simples: recompensar el buen comportamiento y desincentivar el mal comportamiento. Para hacerlo de manera efectiva, debe asegurarse de que su hijo comprenda lo que se considera buen y mal comportamiento. Asegúrese de incluir algo de flexibilidad para que su hijo pueda cometer errores y no sienta que su personalidad está siendo reprimida.
Al recompensar el buen comportamiento, celebre pequeños y grandes éxitos. Simplemente acariciar el hombro de su hijo o abrazarlo después de que haga algo bien puede darle un gran impulso.
Al desincentivar el mal comportamiento, cuando necesite disciplinar a su hijo, asegúrese de que su hijo entienda por qué y no le grite. Sea alentador y solidario.
La vida puede parecer abrumadora para alguien con TDAH. Crear estructura, establecer rutinas y mantener su hogar organizado puede ayudar a que la vida diaria se sienta más manejable. Asegúrese de que su hijo tenga un lugar tranquilo donde pueda leer y estudiar o simplemente estar solo y pensar. Cuando se enfrente a una tarea particularmente complicada, ayúdelo a descomponerla en pasos más pequeños.
Criar a un niño con TDAH puede ser un desafío, pero también puede ser gratificante. Lo mejor que puede hacer como padre es aprender todo lo que pueda sobre la condición, trabajar en estrecha colaboración con la escuela y el pediatra de su hijo y concentrarse en hacer que la vida sea agradable y manejable para usted y su hijo. Este enfoque puede no resolver todos los problemas que presenta el TDAH, pero puede ayudarle a usted y a su hijo a apreciarse más y a centrarse menos en su condición.