Investigaciones recientes de UCLA destacan una preocupante tendencia de 'whiplash hidroclimático' que afecta los patrones climáticos globales. Este fenómeno describe los cambios rápidos entre un clima extremadamente húmedo y seco, que se han intensificado debido al cambio climático.
El estudio indica que California ha experimentado fluctuaciones significativas, pasando de un invierno húmedo en 2022-23, que resultó en precipitaciones récord y inundaciones, a un inicio de temporada de lluvias récord en 2024. Estas condiciones han llevado a un mayor riesgo de incendios forestales debido a la acumulación de vegetación inflamable seguida de una sequedad extrema.
A nivel mundial, el whiplash hidroclimático ha aumentado entre un 31% y un 66% desde mediados del siglo XX, superando las predicciones de modelos climáticos anteriores. Los investigadores advierten que si las temperaturas globales aumentan 3 grados Celsius por encima de los niveles preindustriales, la frecuencia de estos cambios climáticos extremos podría más que duplicarse.
El estudio atribuye esta tendencia al cambio climático antropogénico, enfatizando particularmente el papel de la 'esponja atmosférica en expansión', que mejora la capacidad de la atmósfera para retener y liberar humedad a medida que las temperaturas aumentan.