El 12 de octubre de 2024, el Ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, declaró que a pesar de las tensiones actuales, la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) no ha encontrado evidencia de dimensiones militares en el programa nuclear de Irán. Enfatizó que Rusia basa su postura en hechos, y que los políticos individuales pueden expresar opiniones que no se alinean con las políticas reales de su gobierno.
El presidente ruso Vladimir Putin y el presidente iraní Masoud Pajeshekiyan se reunieron por primera vez en Asjabad, Turkmenistán. Los líderes discutieron los últimos desarrollos en Asia Occidental y anunciaron un acuerdo de exportación de 1.7 mil millones de dólares para drones y otros productos de defensa entre ambas naciones. Putin apoyó abiertamente a Irán y advirtió a Israel contra un ataque, declarando: 'No te atrevas a atacar a Irán.'
El 1 de octubre, Irán lanzó un ataque contra Israel con más de 180 misiles balísticos, afirmando que era una represalia por las muertes de figuras clave, incluido el líder de Hamas Ismail Haniyeh y el jefe de Hezbollah Hassan Nasrallah, quienes fueron asesinados en ataques israelíes. En respuesta, Israel ha prometido vengarse de Irán, con informes que indican que cualquier ataque será más severo y se centrará en las instalaciones nucleares y de petróleo de Irán. Irán también ha amenazado con responder con fuerza si Israel lleva a cabo acciones de represalia.