El 4 de octubre de 2024, el aumento de las tensiones entre Israel e Irán ha llevado a un aumento significativo en los precios del petróleo, con el crudo Brent subiendo un 5% hasta alcanzar niveles no vistos en un año. Las preocupaciones sobre un posible ataque israelí a las instalaciones petroleras iraníes han provocado fluctuaciones en el mercado.
El crudo Brent se informó en aproximadamente 78 dólares por barril tras las noticias de que el presidente estadounidense Joe Biden está considerando apoyar los ataques israelíes a la infraestructura energética de Irán. Mientras tanto, el crudo estadounidense se mantiene estable en torno a los 74 dólares.
Esta semana, la posibilidad de interrupciones en el suministro de petróleo desde Oriente Medio ha impulsado los precios un 8%, alcanzando los niveles más altos en años recientes. Vishnu Varathan, jefe de economía y estrategia de Asia en Mizuho Bank en Singapur, señaló que a pesar de los precios en aumento, el mercado aún no ha valorado completamente la posibilidad de una guerra a gran escala.
Las tensiones se han intensificado debido a las amenazas de Irán de enviar tropas al sur del Líbano y ataques con misiles dirigidos a Israel, como respuesta a las operaciones israelíes contra Hezbollah. Los países del G-7 han instado a los actores regionales a actuar de manera responsable y con moderación.
Oriente Medio representa aproximadamente un tercio del suministro mundial de petróleo. Según Citigroup Inc., un ataque israelí a gran escala contra la capacidad de exportación de Irán podría resultar en una pérdida de 1,5 millones de barriles por día del suministro de petróleo global.