BMW AG está abogando por que el gobierno alemán rechace los aranceles propuestos por la Unión Europea sobre los vehículos eléctricos fabricados en China, enfatizando el impacto negativo potencial en el comercio global. El 2 de octubre de 2024, el CEO de BMW, Oliver Zipse, declaró que los aranceles adicionales podrían perjudicar a las empresas alemanas activas a nivel internacional y provocar un conflicto comercial del que nadie se beneficiaría. Sus comentarios reflejan las preocupaciones compartidas por otros fabricantes alemanes sobre el mantenimiento de relaciones sólidas con su mayor mercado.
Zipse instó al gobierno a adoptar una postura clara en contra de los aranceles, subrayando la importancia de la cooperación internacional en el sector automotriz. La decisión inminente sobre los aranceles tiene implicaciones significativas para la relación comercial entre la UE y China y podría influir en la economía global en general.
Este llamado a la acción se produce en un momento en que las tensiones comerciales ya están elevadas y la industria automotriz enfrenta desafíos relacionados con las cadenas de suministro y el acceso al mercado.