Un informe reciente del GOP de la Cámara ha levantado alarmas sobre las colaboraciones de investigación de EE. UU. con instituciones chinas, sugiriendo que tales asociaciones podrían fortalecer involuntariamente al ejército chino. El informe, según lo informado por el New York Times, destaca que la investigación financiada por el Departamento de Defensa, destinada inicialmente a mantener una ventaja tecnológica, ha podido ser utilizada para beneficiar al ejército chino.
Los hallazgos piden prohibir a todos los investigadores financiados por el gobierno federal trabajar con instituciones chinas vinculadas al ejército, una medida que podría limitar significativamente las colaboraciones académicas entre EE. UU. y China. Notablemente, la Universidad de California, Berkeley, y el Instituto de Tecnología de Georgia fueron mencionados en el informe por supuestas colaboraciones que podrían servir a los intereses militares y comerciales del Partido Comunista Chino.
Ambas universidades han negado las acusaciones, y Georgia Tech afirmó que una investigación interna no encontró evidencia de que la investigación beneficiara al ejército chino. A pesar de esto, Georgia Tech ha decidido terminar su asociación con el Instituto de Shenzhen ante la preocupación de que el Congreso podría recortar el financiamiento federal para instituciones que colaboren con el PCC.
Berkeley también ha puesto fin a su asociación con el Instituto Tsinghua-Berkeley de Shenzhen, aunque también afirmó que no se encontraron pruebas de que los investigadores en el instituto estuvieran promoviendo los intereses chinos. Las implicaciones de este informe podrían llevar a una reevaluación significativa de las asociaciones de investigación entre EE. UU. y China, tensando aún más las relaciones entre las dos naciones.