Un estudio reciente de la Universidad de Texas en El Paso (UTEP) destaca el uso de la Dinámica de Fluidos Computacional (CFD) para modelar la producción de propulsores utilizando recursos in situ. Esta investigación es crucial para hacer que la futura exploración espacial sea más sostenible y rentable al aprovechar los recursos disponibles en otros cuerpos planetarios.
La utilización de recursos in situ (ISRU) está ganando terreno como un método para reducir los gastos de misión mediante la utilización de recursos encontrados en el espacio. Un enfoque principal es la creación de combustible para cohetes a partir de los recursos disponibles en la Luna y Marte, lo que disminuiría significativamente la cantidad de material que necesita ser transportado desde la Tierra.
La NASA está colaborando activamente con OxEon Energy para crear un sistema capaz de transformar el suelo lunar en oxígeno y metano. Este sistema incorpora un condensador diseñado para separar el agua del metano, situado entre el reactor de metanación y el sistema de electrólisis de óxido sólido (SOE). Los investigadores de la UTEP han dirigido sus esfuerzos de CFD hacia este condensador, utilizando STAR-CCM+, un software desarrollado por Siemens, para simular y optimizar su rendimiento.
El modelo CFD se centra en métricas clave como la tasa de condensación y el caudal másico de gas, ambos medidos en gramos por hora. Estas métricas son vitales para mejorar la eficiencia del condensador en la separación de agua del metano, contribuyendo así a la eficacia general de las tecnologías ISRU. Al optimizar la producción de propulsores en el espacio, las misiones espaciales pueden volverse más factibles y asequibles.