El 13 de enero de 2025, los astrónomos lograron avances significativos en la imagen de agujeros negros distantes, revelando el potencial para visuales de alta resolución de estos fenómenos cósmicos. El estudio, publicado en Astronomy & Astrophysics, se centra en los agujeros negros supermasivos ubicados en los centros de las galaxias, particularmente en sus colosales chorros que pueden extenderse millones de años luz y viajar cerca de la velocidad de la luz.
Se utilizó el Telescopio Event Horizon (EHT), una red de ocho telescopios de radio en tierra, para observar la galaxia NGC 1052, situada aproximadamente a 60 millones de años luz de la Tierra. El agujero negro supermasivo en su centro tiene una masa 150 millones de veces mayor que la del Sol y emite dos chorros en direcciones opuestas.
A pesar de las preocupaciones iniciales sobre la debilidad del centro de la galaxia, los astrónomos lograron obtener datos cruciales. Las observaciones indicaron que la región alrededor del agujero negro emite ondas de radio brillantes a una longitud de onda de un milímetro, que es accesible para la imagen EHT.
Además, esta área brilla aún más intensamente a longitudes de onda ligeramente más largas, lo que la convierte en un objetivo principal para la próxima generación de EHT, que tiene como objetivo producir no solo imágenes más claras, sino también grabaciones de video de agujeros negros.
El tamaño de la región que genera los chorros alrededor del agujero negro es similar al anillo que rodea al agujero negro supermasivo M87*, el primer agujero negro del que se obtuvo una imagen directa en 2019. Cabe destacar que el campo magnético que rodea el agujero negro en NGC 1052 es 40,000 veces más fuerte que el campo magnético de la Tierra, lo que podría obstaculizar la acreción de materia y facilitar el lanzamiento de potentes chorros.