Investigadores de la Universidad de Varsovia han identificado un grupo previamente desconocido de 29 objetos celestes en las Nubes de Magallanes, caracterizados por erupciones prolongadas que duran varios meses. Estas erupciones resultaron en aumentos de brillo de 10 a 20 veces, distinguiéndolos de las clases conocidas de objetos astronómicos.
Los hallazgos, publicados en el Astrophysical Journal Letters, fueron liderados por el Dr. Przemysław Mróz. Los objetos fueron descubiertos a través de más de 20 años de observaciones del estudio OGLE.
Un objeto notable, designado OGLE-mNOVA-11, brilló en noviembre de 2023, lo que llevó a observaciones detalladas utilizando el Telescopio Grande de África del Sur (SALT). Los espectros revelaron señales de helio, carbono y nitrógeno parcialmente ionizados, indicando temperaturas extremadamente altas.
Observaciones adicionales con el satélite de rayos X Swift detectaron emisiones de rayos X correspondientes a temperaturas de alrededor de 600,000 grados Celsius. Dada su distancia de más de 160,000 años luz, la luminosidad en rayos X de este objeto era más de cien veces mayor que la del Sol.
Las propiedades inusuales de OGLE-mNOVA-11 presentan similitudes con ASASSN-16oh, descubierto en 2016. Estos objetos y otros en el estudio forman una nueva clase de fuentes de rayos X denominada 'millinovae', que son aproximadamente mil veces menos luminosas que las novas clásicas en su máximo brillo.
Los investigadores proponen que estas fuentes son sistemas estelares binarios, que involucran una enana blanca y una subgigante. La materia de la subgigante se transfiere a la enana blanca, lo que lleva a emisiones de rayos X durante las erupciones.
Dos hipótesis explican la producción de rayos X: una sugiere que los rayos X se emiten como resultado de la materia que cae sobre la superficie de la enana blanca, mientras que la otra implica una explosión de fusión nuclear en la superficie de la enana blanca debido al gas de hidrógeno acumulado. Si esta última es correcta, las millinovae podrían ser fundamentales para estudios astrofísicos y cosmológicos, especialmente si las enanas blancas cercanas al límite de Chandrasekhar pueden desencadenar supernovas de tipo Ia, cruciales para medir distancias cósmicas.
Este estudio colaborativo involucró a investigadores de la Universidad de Varsovia, la Universidad de Southampton, la Universidad de Leicester, la Universidad de Ciudad del Cabo y la Universidad del Estado Libre.