El dolor crónico, definido como el dolor que dura más allá del tiempo habitual de curación, a menudo persiste por lo menos tres meses. Puede llevar a varios problemas más allá del dolor en sí, incluyendo fatiga, ansiedad, depresión y una calidad de vida disminuida. La doctora Valeria El Haj, directora médica nacional de Ospedyc, enfatiza que, aunque anteriormente se aconsejaba a los pacientes reposar, las recomendaciones actuales fomentan mantenerse activos para influir directamente en el dolor y combatir problemas asociados.
Las condiciones crónicas pueden incluir enfermedades cardíacas, diabetes, depresión o dolor en la espalda y las articulaciones. Dependiendo de la condición, los médicos de cabecera pueden sugerir medidas de seguridad antes de hacer ejercicio. Por ejemplo, las personas con diabetes deben saber que el ejercicio puede disminuir los niveles de glucosa en sangre, por lo que es esencial medir el nivel de glucosa antes de la actividad física. Aquellos que se aplican insulina o toman medicamentos que reducen el nivel de glucosa podrían necesitar un refrigerio antes de hacer ejercicio para evitar niveles bajos de glucosa en sangre.
Para las personas con artritis, puede ser recomendable ducharse con agua tibia antes de hacer ejercicio. El calor puede relajar las articulaciones y los músculos y aliviar el dolor. También es importante usar un calzado que absorba el impacto y mantenga las articulaciones estables durante el ejercicio.
Programa de Actividad Física
Es importante que la actividad física se encuentre bajo un programa completo de entrenamiento y comprenda los siguientes ejercicios:
Ejercicio aeróbico: este puede ayudar a mejorar la salud cardíaca, la energía y el control del peso.
Ejercicio de fortalecimiento muscular: como el levantamiento de pesas, puede mejorar la fuerza muscular, facilitar las actividades diarias y ayudar a mantener las articulaciones estables.
Ejercicio de flexibilidad: como el estiramiento, pueden ayudar a que las articulaciones se muevan y sigan funcionando bien.
Ejercicios de equilibrio: es otra parte importante del ejercicio, especialmente para los adultos mayores y las personas que tienen problemas para moverse. Los ejercicios de equilibrio pueden prevenir las caídas y disminuir las lesiones debidas a ellas. Practicar taichí, caminar hacia atrás y pararse con una sola pierna son ejemplos de ejercicios que pueden mejorar el equilibrio.
Ventajas
Algunos ejemplos de cómo el ejercicio puede impactar positivamente en la calidad de vida:
Artritis: el ejercicio puede aliviar el dolor, desarrollar la fuerza muscular en las articulaciones y disminuir la rigidez articular.
Asma: en algunas ocasiones, el ejercicio puede ayudar a controlar la frecuencia con la que ocurren los ataques de asma y su intensidad.
Dolor de espalda: el ejercicio aeróbico de bajo impacto es ejercicio regular que aumenta el ritmo cardíaco y que no requiere un esfuerzo adicional del cuerpo. Ayuda a fortalecer la espalda y hace que los músculos funcionen mejor.
Cáncer: el ejercicio tiene la posibilidad de mejorar la calidad de vida de las personas que han tenido cáncer, mejorar su estado físico y reducir el riesgo de morir de cáncer de mama, colorrectal y de próstata.
Demencia: el ejercicio puede mejorar las habilidades de pensamiento en personas con demencia. Las personas que se mueven con regularidad tienen menos riesgo de tener demencia y problemas con el aprendizaje y el pensamiento.
Depresión y ansiedad: la actividad física regular ayuda a mejorar los síntomas de ambas afecciones.
Diabetes: el ejercicio regular puede ayudar a reducir los niveles de glucosa sanguínea, ayudar a controlar el peso y a aumentar la energía. En las personas con diabetes tipo 2, el ejercicio puede reducir el riesgo de morir de enfermedad cardíaca.
Enfermedad cardíaca: el ejercicio regular beneficia al corazón, ya que puede reducir el riesgo de morir por enfermedad cardíaca y prevenir que esta empeore.
Osteoporosis: esta afección hace que los huesos se vuelvan más delgados y se debiliten. Algunos ejercicios, como caminar rápido y levantar pesas, ayudan a fortalecer los huesos y retardan la pérdida ósea.