El 10 de octubre de 2024, el Ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abbas Araqchi, llevó a cabo una serie de reuniones diplomáticas en el Medio Oriente, incluyendo discusiones con funcionarios qataríes en Doha y con el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman en Riad. Estas reuniones se producen en respuesta a la escalada de tensiones tras recientes ataques aéreos israelíes que apuntaron a líderes de grupos respaldados por Irán, incluidos Hamas y Hezbollah.
Araqchi enfatizó el apoyo inquebrantable de Irán a sus aliados en la región, afirmando que Teherán se mantendría 'firmemente al lado de la resistencia' contra las acciones israelíes. Señaló que Irán está preparado para un posible conflicto, pero evaluará cuidadosamente su respuesta en función de las acciones israelíes.
Esta iniciativa diplomática busca fomentar la cooperación regional y explorar soluciones potenciales a la crisis actual, con Araqchi indicando que los canales de comunicación con Estados Unidos permanecen abiertos a través de terceros.
Las discusiones destacan la compleja red de alianzas y enemistades en el Medio Oriente, con implicaciones significativas para la estabilidad regional y las relaciones internacionales.