El 18 de noviembre de 2024, científicos en Japón anunciaron el descubrimiento de minerales submarinos valorados en aproximadamente 26.29 mil millones de dólares, que se espera que apoyen la economía del país durante al menos la próxima década. La encuesta, realizada por la Fundación Nippon y la Universidad de Tokio, identificó un campo de nódulos de manganeso denso ubicado a unas 1,200 millas de Tokio, cerca de la isla Minami-Tori-shima.
Los nódulos de manganeso, encontrados a una profundidad de 5,700 metros, contienen cantidades significativas de cobalto y níquel, ambos esenciales para las baterías de vehículos eléctricos (EV) y otras aplicaciones industriales. La encuesta reveló alrededor de 610,000 toneladas métricas de cobalto y 740,000 toneladas métricas de níquel.
Los precios actuales del mercado estiman el cobalto en 24,300 dólares por tonelada métrica y el níquel en 15,497 dólares por tonelada métrica, lo que da un valor total de 14.82 mil millones de dólares para el cobalto y 11.47 mil millones de dólares para el níquel. El valor total estimado de los minerales descubiertos asciende a 26.29 mil millones de dólares.
Entre abril y mayo de 2024, se identificaron aproximadamente 230 millones de toneladas de estos minerales a través del uso de vehículos submarinos operados de forma remota en 100 sitios del fondo marino. Se cree que los depósitos también pueden contener cobre, lo que añade un valor potencial adicional.
Yasuhiro Kato, profesor de la Universidad de Tokio, declaró que hay planes para extraer tres millones de toneladas de estos nódulos anualmente, comenzando en 2025, mientras se minimiza el impacto ambiental. Esta iniciativa tiene como objetivo establecer una cadena de suministro nacional para la extracción de recursos y la fabricación, reduciendo así la dependencia de Japón de fuentes extranjeras para los materiales de las baterías de EV.