El 23 de septiembre de 2024, Amnistía Internacional instó al Consejo de Derechos Humanos de la ONU a renovar el mandato de su misión de investigación sobre Venezuela, tras alarmantes hallazgos presentados en un informe reciente.
El informe describe una grave crisis de derechos humanos en Venezuela, destacando un deterioro del estado de derecho después de las elecciones presidenciales de julio. Concluye que las violaciones de derechos humanos documentadas podrían calificar como crímenes de lesa humanidad por persecución política.
Ana Piquer, directora para las Américas de Amnistía Internacional, enfatizó la necesidad de una acción efectiva, afirmando que la población venezolana continúa resistiendo la represión sistemática del gobierno de Nicolás Maduro, que ha resultado en 20 muertes debido al uso excesivo de la fuerza y miles de detenciones arbitrarias.
Durante la actual 57ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, que se prolongará hasta el 11 de octubre, se llama a los estados miembros a demostrar su compromiso con los derechos humanos en Venezuela renovando el mandato de la misión de investigación y el mandato del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.
Amnistía Internacional aplaudió los esfuerzos regionales para presentar una resolución que renueve ambos mandatos, asegurando un seguimiento y protección rigurosos durante los próximos dos años, señalando que la comunidad internacional está lista para responsabilizar a los perpetradores.