Según funcionarios ucranianos, Rusia planea lanzar una nueva ofensiva en el este de Ucrania. Se espera que la ofensiva se dirija a la región del Donbás, que ha estado parcialmente controlada por separatistas respaldados por Rusia desde 2014. El ejército ucraniano se está preparando para la ofensiva, que podría comenzar ya esta semana.
Mientras tanto, Ucrania continúa su contraofensiva en el sur del país, con el objetivo de recuperar territorio que fue tomado por Rusia en las primeras etapas de la guerra. Las fuerzas ucranianas han logrado avances significativos en las últimas semanas, rechazando a las tropas rusas en la región de Kherson.
La guerra en Ucrania ha tenido un impacto significativo en la economía global, particularmente en términos de precios de la energía y seguridad alimentaria. El conflicto también ha llevado a un aumento de las tensiones entre Rusia y Occidente, lo que genera preocupación por una posible escalada del conflicto.