El 4 de febrero de 2025, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) anunció la suspensión de su asistencia al desarrollo para los Balcanes Occidentales, una medida que plantea preocupaciones significativas sobre el futuro del apoyo estadounidense en la región. Esta decisión sigue a los comentarios del multimillonario Elon Musk, quien etiquetó a USAID como una 'organización criminal' y pidió su disolución.
Como parte de la suspensión, el portal en línea de USAID ha quedado fuera de servicio, y algunos miembros del personal han sido enviados a licencia obligatoria. Los informes indican que los funcionarios de USAID no cumplieron con las solicitudes de información confidencial del departamento de eficiencia gubernamental de Musk. Sin embargo, se informa que los proyectos que brindan asistencia humanitaria vital están exentos de la suspensión.
Marco Rubio, recientemente nombrado administrador interino de USAID, emitió directrices que indican que la ayuda humanitaria relacionada con medicamentos esenciales, servicios médicos, alimentos, refugio y costos administrativos para la entrega de dicha asistencia continuará. Notablemente, las directrices especifican que la exención no cubre programas relacionados con el aborto, la planificación familiar o la ideología de género.
Antes de la suspensión, USAID estaba activamente involucrado en numerosos proyectos en los Balcanes Occidentales, apoyando iniciativas destinadas a fortalecer las instituciones democráticas, el desarrollo económico y la sociedad civil. Las contribuciones financieras de la agencia desde la década de 1990 se estiman en miles de millones de dólares, impactando significativamente el desarrollo de la región.
Los analistas advierten que la suspensión podría tener consecuencias graves, particularmente para países como Bosnia y Herzegovina y Serbia, donde muchas organizaciones de la sociedad civil dependen de la financiación de USAID. La pérdida de apoyo podría obstaculizar reformas cruciales y debilitar la influencia de EE. UU. en la región en medio de cambios globales en curso.
Davor Gjenero, analista político, enfatizó el papel crítico de la sociedad civil en la construcción de instituciones democráticas. Señaló que sin financiamiento adecuado, muchas organizaciones podrían enfrentar el cierre, complicando aún más el panorama político en Serbia y Bosnia y Herzegovina.
La suspensión de la asistencia de USAID plantea preguntas urgentes sobre el futuro del apoyo internacional a los Balcanes Occidentales. Los países de la región probablemente deberán buscar fuentes de financiamiento alternativas para mantener proyectos y reformas vitales. Los efectos a largo plazo de esta decisión aún están por verse, pero está claro que las repercusiones se sentirán en toda la región.