El 15 de enero de 2025, el gobierno cubano comenzó la liberación de 553 prisioneros tras la decisión de Estados Unidos de sacar a Cuba de su lista de países patrocinadores del terrorismo. Entre los primeros liberados se encuentran Dariel Cruz García, Lisdiany Rodríguez Isaac y Donaida Pérez Paseiro, reconocidos por organizaciones de derechos humanos como prisioneros políticos.
Familiares de varios detenidos políticos fueron convocados a penitenciarías la mañana del miércoles, tras el anuncio del gobierno sobre la liberación gradual. Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores cubano destacó que las liberaciones se basan en un análisis cuidadoso de las disposiciones legales y reflejan la naturaleza humanitaria del sistema penal cubano.
La anunciación se realizó en una carta dirigida al Papa Francisco, quien intervino para facilitar la liberación. Esta intervención no es inusual, ya que la Iglesia católica ha mediado en situaciones similares en el pasado, notablemente a principios de la década de 2000, cuando se liberaron a numerosos opositores políticos.
El mismo día, el gobierno de EE. UU. notificó al Congreso su intención de retirar la designación de Cuba como patrocinador estatal del terrorismo, como parte de un acuerdo facilitado por la Iglesia católica. Funcionarios federales indicaron que muchos prisioneros políticos y otros considerados injustamente detenidos serían liberados antes de que termine el mandato del presidente Joe Biden el 20 de enero.
Estados Unidos también reducirá algunas presiones económicas sobre Cuba, además de revocar un memorando de 2017 del entonces presidente Donald Trump que endureció las sanciones contra la isla. Si bien las autoridades cubanas acogieron con agrado el anuncio de EE. UU., lo consideraron insuficiente dado el embargo en curso y las dificultades asociadas.