El 1 de diciembre de 2024, Donald Trump, el presidente electo de los Estados Unidos, emitió una advertencia severa a las naciones BRICS, incluido Brasil, contra los intentos de reemplazar el dólar estadounidense en el comercio internacional. Trump declaró que los países que participen en tales acciones podrían enfrentar aranceles punitivos de importación del 100 % sobre sus productos.
Trump enfatizó que la noción de que las naciones BRICS se están alejando del dólar ha terminado, exigiendo compromisos de estos países para no crear una nueva moneda BRICS ni apoyar alternativas que socaven el dólar estadounidense. Advertió: 'Pueden buscar otro 'tonto'. No hay ninguna posibilidad de que los BRICS reemplacen al dólar estadounidense en el comercio internacional.'
Esta advertencia se produce poco después de la reciente cumbre de BRICS celebrada en Kazan, Rusia, donde los líderes discutieron la reducción de la dependencia del dólar y el fortalecimiento de sus propias monedas. El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva abogó por el desarrollo de sistemas de pago alternativos entre las naciones BRICS, enfatizando la necesidad de avanzar sin más retrasos.
A medida que Brasil se prepara para asumir la presidencia de los BRICS el 1 de enero de 2025, se espera que las discusiones sobre alternativas al dólar se intensifiquen, junto con la expansión del banco BRICS, actualmente dirigido por la ex presidenta Dilma Rousseff.
Rusia, otro miembro de los BRICS, también ha enfrentado sanciones internacionales tras su invasión de Ucrania, lo que ha llevado a discusiones sobre la reducción de la dependencia del dólar. En la cumbre de Kazan, el presidente Vladimir Putin criticó las políticas de EE. UU., afirmando que EE. UU. utiliza el dólar como un arma y pidió una cooperación bancaria mejorada dentro de los BRICS para facilitar transacciones en monedas locales.