Documentos confidenciales indican que Irán desempeñó un papel significativo en la planificación del ataque de Hamas del 7 de octubre. Estos documentos revelan que Teherán ha estado apoyando financieramente a Hamas durante años, con planes para el asalto en preparación desde hace tiempo.
Desde 2021, el líder de Hamas, Yahya Sinwar, supuestamente ha negociado con Irán sobre el financiamiento de una ofensiva. La correspondencia proporcionada por Israel al Wall Street Journal muestra que estas cartas fueron descubiertas por soldados israelíes en enero dentro de un búnker de Hamas en Khan Younis, la ciudad natal de Sinwar.
Una carta indica que Teherán inicialmente prometió a Sinwar 10 millones de dólares, que luego aumentó a 500 millones de dólares para el desarrollo de estrategias de ataque, lo que equivale a 20 millones de dólares por mes durante dos años.
Correspondencia adicional sin fecha sugiere que Hamas e Irán buscaban mejorar su colaboración militar, incluidos planes para el desarrollo de drones, sistemas de defensa aérea y sistemas de comunicación para futuros conflictos.
Las cartas de Sinwar discuten abiertamente el objetivo de desarraigar el orden regional existente. Otros documentos sugieren que el ataque estaba inicialmente programado para 2022, pero se pospuso para garantizar el apoyo de Irán y Hezbollah.
Israel encontró una presentación en una computadora de Hamas que contenía 3,100 imágenes que mapeaban el 90% del territorio israelí, junto con planes de ataques a aeropuertos, infraestructura estratégica y el parlamento israelí.
Notablemente, los planes incluían el uso de caballos y carros para transportar combatientes, ilustrados con imágenes de un faraón egipcio armado con un arco.
Los representantes iraníes en las Naciones Unidas han reconocido su apoyo financiero y militar a Hamas, pero niegan cualquier participación en el ataque del 7 de octubre, afirmando que Hamas actuó de forma independiente.