Tras las elecciones generales celebradas el 9 de octubre de 2024, Mozambique está a la espera de la anunciación de su nuevo líder, en medio de alegaciones de irregularidades electorales e incidentes de violencia. Las elecciones, que debían ser un proceso sencillo para elegir al Presidente y a los miembros de la Asamblea Nacional, se vieron empañadas por serias acusaciones de fraude e intimidación.
En la capital, Maputo, se produjo un incidente significativo cuando un ciudadano fue disparado mientras se acercaba a un vehículo sospechoso cerca de una estación de votación en la escuela secundaria Kamubukuwana. El principal partido de oposición, RENAMO, afirmó que el vehículo transportaba materiales relacionados con el fraude electoral. El portavoz de RENAMO, Marcial Macome, calificó el incidente de "muy grave", señalando que el ciudadano herido está hospitalizado. Hasta el momento, la policía mozambicana no se ha pronunciado sobre el suceso.
Los informes de irregularidades fueron generalizados, con varias provincias experimentando incidentes que generaron preocupaciones sobre la integridad del proceso electoral. En Chimoio, la capital de la provincia de Manica, las elecciones transcurrieron sin grandes sobresaltos, aunque la competencia entre los candidatos Daniel Chapo y Venâncio Mondlane fue intensa. En contraste, la ciudad de Beira vivió momentos de tensión cuando observadores y miembros de partidos de oposición fueron expulsados de las estaciones de votación durante el conteo, con un presidente de mesa supuestamente agredido por intentar introducir boletas fraudulentas.
En Quelimane, provincia de Zambézia, se incautaron dos urnas con boletas ya marcadas, y dos ciudadanos fueron detenidos al intentar intercambiar las urnas. A pesar de un ambiente tranquilo en la ciudad, estos intentos generaron serias preocupaciones sobre la integridad de las elecciones.
En la provincia de Gaza, más de un millón de votantes fueron convocados, y el proceso se desarrolló en su mayoría con normalidad. Sin embargo, candidatos de oposición, como Agnaldo Navalho del MDM y Félix Tivane de la RENAMO, denunciaron la exclusión de miembros de sus partidos de las mesas electorales y supuestos casos de soborno a sus delegados. Navalho declaró: "Fue un proceso de votación con alta afluencia de votantes, pero la organización estuvo por debajo de las expectativas. Muchos de nuestros miembros fueron excluidos, lo que manchó el proceso." Tivane reforzó estas quejas, añadiendo que algunos delegados de la RENAMO están bajo amenazas de prisión.
Los mozambiqueños en el extranjero también participaron en las elecciones, con lugares de votación en Portugal y Alemania. En Portugal, donde reside la mayor parte de los votantes registrados en Europa, la votación transcurrió pacíficamente, aunque no sin quejas. Algunos votantes se quejaron de no poder votar porque sus nombres no aparecían en los registros electorales. Otros expresaron indignación por la ausencia del partido PODEMOS en la lista de partidos que compiten por la elección de los diputados de la Asamblea Nacional.
David Machava, un votante mozambiqueño en Lisboa, expresó su frustración. "Estamos indignados porque el partido PODEMOS no aparece en la boleta. Nadie nos explicó por qué esta ausencia, lo que claramente perjudica al partido y a sus votantes", dijo.
Por su parte, Pedro Fernandes, presidente de la Organización de la Diáspora Mozambicana (ODM), criticó la limitada capacidad de registro y votación fuera de Portugal y Alemania. "Somos muchos, esparcidos por países como Inglaterra, Francia, Luxemburgo y otros. No es justo que nuestro derecho a voto esté restringido solo a dos países. Hemos estado alertando al gobierno sobre este problema durante años", declaró Fernandes, quien viajó desde Luxemburgo para votar.
La votación se cerró a las 21 horas en Lisboa, con la embajadora de Mozambique en Portugal, Stella Novo Zeca, haciendo un llamado al civismo de los votantes. "Votar es un ejercicio de soberanía", afirmó, destacando la importancia del acto electoral para el futuro del país.
Tras el cierre de las urnas, comenzaron a contarse los votos, y se espera que los resultados sean enviados a la Comisión Nacional de Elecciones de Mozambique en las próximas horas. El proceso de conteo está en marcha, supervisado por más de 12,000 observadores nacionales e internacionales, quienes destacan la ocurrencia de algunas irregularidades en diferentes partes del país.
La Sala de la Paz, una plataforma de observación electoral, informó que el inicio del conteo tuvo algunos desafíos logísticos, como falta de luz en algunas estaciones de votación, pero en general, el proceso fue considerado satisfactorio. La Comisión Nacional de Elecciones (CNE) tiene hasta 15 días para anunciar los resultados finales, pero los primeros datos preliminares ya están siendo recopilados en varias provincias. Se espera que, si no hay segunda vuelta, se anuncie un nuevo presidente dentro de este período.