El 3 de octubre de 2024, más de 20 personas murieron y al menos 15 resultaron heridas en un ataque de la banda armada Gran Grif en Pont Sonde, Haití. El incidente ha obligado a los residentes locales a huir en masa hacia la plaza pública de Saint-Marc, aproximadamente a 100 kilómetros de la capital, Puerto Príncipe.
La banda Gran Grif, con base en Savien, lanzó el ataque en la madrugada, y es posible que el número de víctimas aumente a medida que la situación evoluciona. Los heridos están recibiendo tratamiento en varios centros de salud, especialmente en el hospital Saint Nicolas de Saint-Marc.
En respuesta a la violencia, el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública de Haití ha instruido a la Policía Nacional para restablecer el orden y combatir a quienes siembran el terror en el departamento de Artibonite. El Ministerio enfatizó que estos crímenes no quedarán impunes y prometió tomar todas las medidas necesarias para devolver la paz.
Este ataque se produce poco después de que Estados Unidos y las Naciones Unidas anunciaran sanciones contra el líder de Gran Grif, Luckson Elan. Haití enfrenta una violencia extrema por parte de bandas armadas, que ha desplazado a más de 700,000 personas, más de la mitad de las cuales son niños, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Los últimos informes indican un aumento del 22 % en las personas desplazadas desde junio, lo que agrava la situación humanitaria. En los últimos siete meses, la violencia de las bandas ha obligado a más de 110,000 individuos a abandonar sus hogares, especialmente en Gressier, al oeste de la capital.
Actualmente, aproximadamente el 75 % de las personas desplazadas en Haití se refugian en las provincias, y la región del Gran Sur alberga al 45 % de todas las personas desplazadas. Un informe reciente de la Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (BINUH) indicó que al menos 1,379 personas fueron víctimas de la violencia de las bandas en el segundo trimestre de 2024, elevando el total a casi 3,900 víctimas para la primera mitad del año. En 2023, la violencia causó 8,000 víctimas, según cifras de la ONU.