A medida que 2024 llega a su fin, Universe Space Tech reflexiona sobre eventos significativos en la exploración espacial, desde los éxitos de Starship hasta los desafíos de Starliner, junto con nuevas misiones interplanetarias y la conclusión de otras.
El helicóptero Ingenuity, que fue desplegado en Marte por el rover Perseverance en abril de 2021, originalmente sirvió como demostrador tecnológico. Su objetivo principal era probar la viabilidad de la exploración aérea del Planeta Rojo utilizando vehículos más pesados que el aire.
Ingenuity superó las expectativas, completando casi tres años de operaciones y volando aproximadamente 17 kilómetros, a pesar de que fue diseñado para solo cinco vuelos y 30 días. Desafortunadamente, su 72° vuelo el 18 de enero de 2024 terminó con un aterrizaje de emergencia que dañó sus palas, dejándolo incapaz de volar. NASA mantuvo comunicación con Ingenuity por un tiempo antes de pasarlo al modo de estación de investigación autónoma, donde se espera que despierte diariamente, mida temperaturas y tome imágenes, almacenando datos para futuras misiones.
2024 estuvo marcado por los continuos avances de SpaceX con Starship, realizando cuatro vuelos de prueba del sistema de cohetes más potente de la historia. El séptimo vuelo está programado para principios de 2025, con una versión mejorada de la nave espacial que contará con tanques de combustible más grandes. Los objetivos clave incluyen alcanzar la órbita, el reabastecimiento orbital y las operaciones de recuperación utilizando Mechazilla. El éxito de estas operaciones es crucial para los plazos relacionados con el regreso humano a la Luna y las ambiciones de Elon Musk de una misión a Marte para finales de la década.
En contraste, Boeing enfrentó desafíos significativos con su nave CST-100 Starliner. Originalmente programado para 2017, el primer vuelo no tripulado no tuvo lugar hasta 2019, seguido de una serie de problemas. El Starliner finalmente despegó con tripulación en junio de 2024, pero debido a problemas de propulsión, NASA decidió no utilizarlo para el regreso de los astronautas Butch Wilmore y Sunita Williams, quienes permanecieron a bordo de la ISS durante ocho meses. Aunque el Starliner finalmente regresó con éxito, su futuro sigue siendo incierto en medio de rumores sobre la posible cancelación del proyecto o su venta.
A principios de 2024 también se llevaron a cabo dos misiones lunares privadas. El lander Peregrine de Astrobotic experimentó una fuga de combustible poco después de la separación, lo que obligó a su reentrada en la atmósfera terrestre. En cambio, el Odysseus de Intuitive Machines se convirtió en la primera nave espacial privada en aterrizar en la Luna entre el 22 y el 23 de febrero, a pesar de las dificultades técnicas durante el aterrizaje que comprometieron su comunicación.
La JAXA de Japón lanzó el lander SLIM en septiembre de 2023, que tenía como objetivo demostrar la tecnología de aterrizaje de precisión. Después de un largo viaje, comenzó su descenso el 19 de enero de 2024, pero experimentó una falla en el motor, lo que resultó en un aterrizaje no estándar. A pesar de esto, SLIM demostró su objetivo principal y transmitió varias imágenes de vuelta a la Tierra.
La misión Chang'e-6 de China hizo historia al recolectar y devolver muestras lunares de la cara oculta de la Luna, lanzada el 3 de mayo y aterrizando con éxito el 25 de junio. Los hallazgos de esta misión sugieren una actividad volcánica prolongada en la Luna, reflejando las crecientes ambiciones espaciales de China y sus planes para un aterrizaje tripulado en la Luna para finales de la década.
La misión Polaris Dawn, financiada por el multimillonario Jared Isaacman, se lanzó el 10 de septiembre de 2024, logrando dos hitos: un nuevo récord de altitud para una nave espacial tripulada y la primera caminata espacial privada, en la que participaron Isaacman y la astronauta Sarah Gillis.
El Europa Clipper de la NASA, dirigido a la luna helada de Júpiter, se lanzó en 2024, mientras que la misión Hera de la Agencia Espacial Europea se centró en el sistema de asteroides Didymos, que llegará a Dimorphos a finales de 2026 para estudiar los efectos de un impacto previo.
En diciembre, la ESA lanzó Proba-3, que creará eclipses solares artificiales para observar la corona solar. Mientras tanto, el telescopio NEOWISE concluyó su misión después de más de una década de servicio, finalizando con su reentrada el 2 de noviembre de 2024.
2024 terminó con la sonda solar Parker estableciendo un nuevo récord al acercarse al Sol a una distancia de 6,2 millones de kilómetros, gracias a una maniobra realizada en noviembre. Este logro coloca a Parker en la parte superior de la corona solar, con su escudo térmico soportando temperaturas de 1500 °C. Aunque Parker no cambiará más su órbita, es probable que su misión continúe debido al éxito operativo.