Un estudio reciente de la NASA propone que la vida microbiana podría existir bajo la superficie helada de Marte, apoyada por charcas de agua de deshielo formadas dentro del hielo del planeta. Utilizando modelado por computadora, los investigadores demostraron que la luz solar puede penetrar en el hielo de agua, facilitando potencialmente la fotosíntesis en charcas de agua poco profundas.
El autor principal, Aditya Khuller del Jet Propulsion Laboratory de la NASA, enfatizó que las exposiciones de hielo marciano son sitios prometedores para estudios astrobiológicos. Marte presenta dos tipos de hielo: hielo de agua y dióxido de carbono congelado. El estudio, publicado en Nature Communications Earth & Environment, se centró en el hielo de agua, que se ha acumulado durante millones de años a partir de nieve y polvo.
Las partículas de polvo dentro del hielo pueden oscurecer la luz en capas más profundas, pero juegan un papel crucial en el calentamiento del hielo. El polvo oscuro absorbe la luz solar, lo que lleva a la fusión a profundidades de varios pies bajo la superficie. Aunque existe un debate entre los científicos sobre la fusión del hielo en Marte debido a su atmósfera delgada, el estudio sugiere que las condiciones subterráneas difieren significativamente de las condiciones de superficie.
En la Tierra, ocurren procesos similares donde se forman agujeros de crioconita, permitiendo que ecosistemas prosperen en charcas de agua de deshielo. El coautor Phil Christensen, que ha estudiado el hielo marciano durante décadas, señaló que el proceso de fusión puede ocurrir de adentro hacia afuera, creando un efecto invernadero.
Este estudio indica que la fotosíntesis podría tener lugar hasta 9 pies (3 metros) bajo la superficie marciana, con capas de hielo protectoras que evitan la evaporación y protegen contra la radiación. Los autores señalan que los lugares más favorables para estas charcas subterráneas se encuentran en los trópicos de Marte, entre 30 y 60 grados de latitud.
Las investigaciones futuras tienen como objetivo recrear el hielo polvoriento marciano en condiciones de laboratorio para investigar más a fondo sus propiedades. Los científicos también están identificando lugares potenciales en Marte para futuras misiones que apunten a estas ubicaciones de agua de deshielo poco profundas.