Investigadores de la Universidad Politécnica de Milán han descubierto túneles subterráneos en el castillo Sforza (Castello Sforzesco) en Milán utilizando radar de penetración terrestre y escáneres láser. La existencia de estos túneles fue mencionada previamente en las obras de Leonardo da Vinci, según el sitio web de la universidad.
Construido en el siglo XV, el castillo Sforza ha sido durante mucho tiempo un foco de interés para académicos e historiadores. Ha desempeñado varios roles a lo largo de los años, incluyendo el de residencia, fortaleza y centro de poder en Milán. El castillo está rodeado de numerosos misterios, algunos de los cuales ahora han sido confirmados. Una leyenda sugería que existía una vasta red de pasajes secretos bajo el castillo, como lo describía da Vinci. La tecnología moderna ha validado ahora la existencia de estos túneles.
El estudio empleó tecnologías avanzadas, incluyendo radar de penetración terrestre y escáneres láser, que permitieron a los investigadores detectar vacíos y pasajes subterráneos a pocos centímetros de la superficie.
El profesor Franco Guzzetti de la Universidad Politécnica de Milán declaró que el objetivo del proyecto es crear un 'gemelo digital' del castillo. Este modelo facilitará el estudio de elementos ocultos del castillo que antes no eran accesibles.
Los investigadores creen que algunos de los túneles descubiertos se utilizaron con fines militares. Además, uno de los túneles podría haber estado conectado a una iglesia donde el duque Ludovico Sforza lloraba a su esposa, Beatriz d'Este. Se dice que el duque nunca se recuperó de la pérdida, lo que llevó a lo que el historiador Luciano Chiappini describió como un 'duelo casi loco', que finalmente resultó en la caída de la dinastía Sforza.
El castillo Sforza también inspiró al arquitecto Aristotele Fioravanti en la construcción de nuevos muros de fortaleza para el Kremlin en las décadas de 1470 y 1480, particularmente evidente en los reconocibles merlones en forma de 'cola de golondrina' en las paredes del Kremlin.
En agosto de 2024, las autoridades de la ciudad de Milán anunciaron el inicio de los trabajos de restauración de los frescos de Leonardo da Vinci en el castillo. Se espera que los trabajos comiencen a principios de 2025 y se completen antes del inicio de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2026, que se llevarán a cabo en Milán y Cortina d'Ampezzo. El presupuesto del proyecto es de 1,625 millones de euros.
Anteriormente, arqueólogos utilizaron radar de penetración terrestre y estudios acústicos para descubrir una red oculta de túneles, conocida como Chincana, que se extiende por más de 1.75 km en Cusco, Perú. Esta red incluye tres ramales: uno que conduce a Callispukio, otro a la torre Muyucmarca en la fortaleza de Sacsayhuamán, y un tercero que pasa detrás de la iglesia de San Cristóbal. La información clave sobre la disposición del túnel se obtuvo de registros de 1594 realizados por un jesuita cuyo nombre no ha sobrevivido.