El rompehielos de investigación chino Xuelong-2, también conocido como Dragón de Nieve-2, ha comenzado su misión de un mes en el mar de Amundsen como parte de la 41ª expedición antártica. Este viaje significativo busca mejorar nuestra comprensión de los ecosistemas marinos polares.
Dirigida por el capitán Luo Guangfu, la expedición se centra en un área de estudio ubicada principalmente al sur de los 68 grados de latitud. El equipo investigará varios aspectos de la hidrología, meteorología, química, biología y geología marinas antárticas.
Durante la misión, los investigadores recogerán muestras de agua de mar polar, sedimentos, gases y materiales biológicos, que se analizarán en el laboratorio a bordo. Estos datos son cruciales para monitorear los cambios anuales en los parámetros ecológicos marinos polares, ayudando a proteger estos frágiles entornos.
Organizada por el Ministerio de Recursos Naturales de China, la expedición también tiene como objetivo estudiar los impactos del cambio climático en los ecosistemas antárticos y promover la cooperación científica internacional.