El estudio de la conciencia animal está experimentando un auge sin precedentes, y las predicciones sobre su futuro son diversas y fascinantes. El Jeremy Coller Centre for Animal Sentience de la London School of Economics (LSE), que abrirá sus puertas en otoño de 2025, se posiciona como un centro clave en esta investigación. Este centro, financiado con 4 millones de libras, se enfocará en el estudio científico de los sentimientos de los animales, con el objetivo de desarrollar mejores políticas y leyes para su bienestar.
Una de las áreas de investigación más prometedoras es el uso de la inteligencia artificial (IA) para comprender y mejorar la comunicación con los animales. Se prevé que la IA pueda traducir señales animales en palabras, abriendo nuevas vías para la interacción humano-animal. Sin embargo, también se plantean desafíos éticos, como la posibilidad de que la IA malinterprete las necesidades de los animales, lo que podría llevar a un bienestar animal deficiente. Expertos como el profesor Jonathan Birch, director del centro, enfatizan la necesidad de marcos éticos para regular el papel de la IA en este campo.
Además, el centro explorará el impacto de la IA en otros contextos relacionados con los animales, como en los vehículos autónomos y la agricultura. Se analizará cómo estas tecnologías afectan a los animales y si las prácticas agrícolas deben priorizar la eficiencia o el bienestar animal. El centro también colaborará con organizaciones no gubernamentales (ONG) y expertos legales para desarrollar códigos de práctica globales. El futuro de la conciencia animal, según estas investigaciones, podría redefinir la relación entre humanos y animales, promoviendo un trato más ético y compasivo para todas las especies.