Las dos últimas orcas cautivas de Francia, Wikie y su hijo Keijo, se encuentran en una situación desesperada. Fueron filmadas varadas en un parque marino infestado de algas cerca de Cannes. Esto ocurrió meses después de que Marineland Antibes cerrara sus puertas.
Activistas por los derechos de los animales están circulando imágenes de la difícil situación de las orcas. Esperan que el gobierno francés las reubique antes de que sea demasiado tarde. Marineland Antibes cerró el 5 de enero, tras las prohibiciones francesas de espectáculos de delfines y ballenas.
Imágenes aéreas desgarradoras muestran a los cetáceos languideciendo en piscinas ahogadas por las algas. El parque se asemeja a un SeaWorld postapocalíptico. Las campañas para reubicar a las orcas han fracasado hasta ahora.
Las autoridades francesas están bloqueando los esfuerzos para trasladar a los animales a un zoológico marino en Japón. Las autoridades españolas rechazaron una propuesta para trasladarlos a Loro Parque en Tenerife. Afirmaron que la instalación carecía de espacio suficiente.
Lori Marino, presidenta del Proyecto Santuario de Ballenas, está haciendo campaña para reubicar a Wikie y Keijo en Nueva Escocia, Canadá. Ella cree que esta es la "única opción que queda". El equipo cuenta con expertos de un santuario de ballenas diseñado para albergar a Keiko, la orca de "Liberad a Willy".
Los gerentes de Marineland enfatizaron que Wikie y Keijo "deben irse ahora" por su propio bienestar. Liberarlos en la naturaleza no es una opción, ya que ambos nacieron en cautiverio. Los defensores de los animales están instando a que se cree un ambiente limpio y seguro para que las orcas vivan sus años restantes.