La investigadora Jamie Knaub emprendió recientemente una misión significativa para digitalizar el esqueleto del vaquita, un pequeño marsopa nativa del Golfo de California, México. Con solo 10 a 13 individuos restantes, el vaquita es el mamífero marino más raro del mundo.
Transportar el delicado esqueleto requirió que Knaub lo llevara como equipaje de mano durante su vuelo de California a Florida, mostrando los esfuerzos que hacen los investigadores para proteger este preciado espécimen. En la Universidad Atlántica de Florida, Knaub utilizó un escáner micro-CT para crear imágenes 3D detalladas del esqueleto, permitiendo un estudio adicional sin dañar los huesos.
El vaquita, conocido por sus distintivas marcas oscuras alrededor de los ojos y labios, enfrenta la extinción principalmente debido a las prácticas de pesca ilegales que apuntan al pez totoaba, cuya vejiga natatoria es muy valorada en la medicina tradicional. El trabajo de Knaub tiene como objetivo crear conciencia y promover esfuerzos de conservación para esta especie esquiva.
Como Knaub señaló: 'Es realmente triste que la especie se esté desvaneciendo ante nuestros ojos.' Su proyecto de digitalización garantizará que las generaciones futuras puedan estudiar y apreciar el vaquita, incluso si desaparece de nuestros océanos.