Los expertos en bienestar animal están alertando sobre los riesgos del golpe de calor, la deshidratación y otros problemas relacionados para las mascotas, especialmente perros y gatos. A diferencia de los humanos, estos animales no pueden regular su temperatura corporal de manera tan efectiva, dependiendo principalmente del jadeo. En días que superan los 30°C, este mecanismo puede ser insuficiente, poniendo a los animales en riesgo.
La veterinaria Laura Espinosa Caixedo enfatiza que ciertos signos pueden indicar deshidratación o golpe de calor en las mascotas. La deshidratación puede reconocerse por encías pegajosas, ojos hundidos, disminución de la elasticidad de la piel, letargo y reducción de la orina. En contraste, el golpe de calor puede manifestarse a través de respiración rápida y dificultosa, aumento de la frecuencia cardíaca, vómitos, diarrea, desorientación, convulsiones y colapso.
Consejos para prevenir el golpe de calor:
Hidratación constante: Asegúrese de que las mascotas tengan acceso a agua fresca y limpia en todo momento.
Evitar el ejercicio en horas pico de calor: Limite los paseos entre las 11 a.m. y las 4 p.m.
Proporcione sombra y refugio: Las mascotas deben tener acceso a áreas frescas y sombreadas para descansar alejadas de la luz solar directa.
Nunca deje a las mascotas en el automóvil: Las temperaturas dentro de los vehículos estacionados pueden aumentar rápidamente a niveles peligrosos, incluso con las ventanas abiertas.
Nutrición adecuada: Ofrezca comidas ligeras y frescas en días calurosos y considere golosinas hidratantes como trozos de frutas o hielo (si es adecuado para la mascota).
Productos refrigerantes: Utilice mantas refrigerantes, chalecos de enfriamiento y mantas húmedas para ayudar a bajar la temperatura corporal de su mascota.