Los precios del oro están experimentando un aumento, impulsado por una confluencia de factores que incluyen las tensiones comerciales, la inestabilidad geopolítica y la incertidumbre económica. La relación inversa del oro con el dólar estadounidense significa que un dólar más débil generalmente conduce a precios del oro más altos, ya que el oro se cotiza en dólares estadounidenses.
Las tensiones comerciales, particularmente entre Estados Unidos y China, son un factor importante. Las preocupaciones sobre una posible desaceleración económica global, especialmente en las principales economías como Estados Unidos y Alemania, también están empujando a los inversores hacia el oro como un activo de refugio seguro.
Los bancos centrales de todo el mundo están aumentando sus reservas de oro para protegerse contra la inestabilidad económica mundial. El Consejo Mundial del Oro informó que los bancos centrales compraron 1.045 toneladas de oro en 2024, casi igualando los récords anuales anteriores, a medida que diversificaban las reservas y reducían la dependencia del dólar estadounidense. Las compras continuaron en 2025, con 18 toneladas en enero y 29 toneladas en febrero.