Los mercados bursátiles europeos comenzaron la semana con ligeras caídas, ya que las ganancias del viernes tras los sólidos datos de empleo en EE. UU. fueron rápidamente revertidas. El DAX cayó un 0,3 % a 19,068 puntos, mientras que el Euro Stoxx 50 disminuyó un 0,1 % a 4,949. A pesar de los riesgos geopolíticos en el Medio Oriente, especialmente tras los ataques con misiles iraníes a Israel, las reacciones del mercado han sido relativamente moderadas.
En Alemania, la entrada de nuevos pedidos cayó drásticamente un 5,8 % en agosto, lo que genera preocupaciones sobre la demanda industrial del país. Esta caída sugiere que la economía alemana podría estancarse en la segunda mitad del año, con una recuperación que probablemente será lenta.
Los sectores sensibles a las tasas de interés vieron una venta, especialmente en acciones tecnológicas e inmobiliarias. Sin embargo, las acciones bancarias aumentaron un 0,8 %, beneficiándose de tasas de interés más altas que mejoran los márgenes de préstamos. Commerzbank lideró las ganancias en el DAX con un aumento del 1,9 %, a pesar de las advertencias de su nueva CEO sobre los riesgos asociados con una posible adquisición por parte de UniCredit de Italia.
En Italia, el índice FTSE MIB mostró una ligera mejora, impulsado por las ganancias de Amplifon, que subió un 4 % antes de sus resultados trimestrales, y Recordati, que aumentó un 1,2 % tras una adquisición de derechos de medicamentos. En general, el sentimiento en el sector bancario mejoró, con UniCredit e Intesa Sanpaolo ganando un 0,5 % y un 0,9 %, respectivamente.