La actividad empresarial en la Eurozona experimentó su primer declive en siete meses en septiembre, impulsada principalmente por una desaceleración en Francia tras la finalización de los Juegos Olímpicos de París. Según el índice de gestores de compras (PMI) de S&P Global, el índice cayó a 48.9, desde 51 en agosto, lo que indica contracción.
Cyrus de la Rubia, economista jefe de Hamburg Commercial Bank, destacó que la Eurozona se dirige hacia la estancación, con contribuciones significativas a esta caída provenientes de Alemania y Francia. El sector privado francés ha vuelto a la contracción, mientras que la actividad empresarial en Alemania experimentó su mayor caída desde febrero.
Con el gobierno minoritario de Francia planeando una política fiscal más estricta, las perspectivas de crecimiento en el país parecen cada vez más sombrías. El sector manufacturero en la Eurozona ha estado en contracción durante dieciocho meses consecutivos.