Estados Unidos está alterando su papel en el conflicto entre Ucrania y Rusia, retirándose de la mediación directa en las negociaciones de paz [3, 7]. Según el Departamento de Estado, Washington alienta a Kiev y Moscú a entablar conversaciones directas para resolver la crisis actual [3].
La portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, declaró el 1 de mayo de 2025 que Estados Unidos cambiará su enfoque y ya no participará tan activamente en la mediación de las reuniones [3]. Bruce enfatizó que ahora depende de ambas partes presentar ideas concretas para poner fin al conflicto [3, 5].
El vicepresidente JD Vance se hizo eco de este sentimiento, declarando el 1 de mayo de 2025 que la resolución de la guerra ahora depende de que Rusia y Ucrania lleguen a un acuerdo [3, 2]. A pesar de este cambio, Estados Unidos mantiene su compromiso de apoyar los esfuerzos de paz en Ucrania [3].