El sindicato más grande de Noruega, LO, está intensificando su campaña en 2025, instando al fondo soberano del país, de 1,8 billones de dólares, a desinvertir en empresas que ayudan a Israel en los territorios palestinos ocupados [3, 4]. Este llamamiento refleja la creciente preocupación por las violaciones del derecho internacional y los derechos humanos [3, 4, 16].
LO, que se alinea con el Partido Laborista gobernante, a menudo influye en la política más allá de los derechos tradicionales de los trabajadores [3]. El líder adjunto Steinar Krogstad enfatizó que el fondo no debería invertir en empresas con actividades en los territorios palestinos ocupados, citando la situación actual en Gaza y Cisjordania [3, 4]. Krogstad ha sido un firme defensor de Palestina [27].
LO, junto con otras 47 organizaciones, envió una carta al Ministro de Finanzas, Jens Stoltenberg, solicitando la desinversión de empresas con riesgos inaceptables de complicidad en la violación del derecho internacional [3]. También buscan directrices más claras para excluir a las empresas del fondo para garantizar la alineación con el derecho internacional [3]. Según un informe reciente, el fondo poseía acciones por valor de 1.500 millones de dólares en 77 empresas israelíes [6]. El fondo ya se ha desinvertido de la empresa de telecomunicaciones Bezeq [7, 10].