Arabia Saudita está a punto de unirse al Programa Global de Combate Aéreo (GCAP), una iniciativa colaborativa liderada por el Reino Unido, Italia y Japón para desarrollar un caza de nueva generación. El Ministro de Asuntos Exteriores italiano, Antonio Tajani, anunció que el acuerdo con el Reino Unido y Japón probablemente se extenderá ahora para incluir a Arabia Saudita.
No es sorprendente la inclusión de naciones adicionales en el programa, ya que se discutió esta expansión a principios de noviembre. El GCAP, presupuestado en miles de millones de euros, se espera que entre en servicio a mediados de la década de 2030, reemplazando cazas existentes como el Boeing F-15 y el Eurofighter Typhoon.
Arabia Saudita ha estado buscando activamente mejorar la flota de cazas de su fuerza aérea y había intentado previamente ordenar cazas Typhoon, aunque Alemania, un socio de larga data en el programa desde la década de 1980, bloqueó inicialmente este intento.
El gobierno saudí ha lanzado un ambicioso proyecto de industrialización con el objetivo de reducir su dependencia del petróleo, siendo las inversiones en defensa un enfoque principal. El GCAP fue iniciado en 2022 tras los estudios del Reino Unido para un caza furtivo avanzado, el Tempest, con Italia y Japón mostrando rápidamente interés en compartir responsabilidades del programa, que será dirigido por BAE Systems, Leonardo y Mitsubishi.
Suecia participó en estudios preliminares, pero desde entonces decidió no continuar. Mientras tanto, Francia, Alemania y España lideran su propio proyecto, el Sistema de Combate Aéreo del Futuro (FCAS), al que se espera que se una Bélgica en 2025.