El 15 de noviembre de 2024, Gazprom anunció la suspensión de las entregas de gas a Austria, efectiva a partir del 16 de noviembre. Esta decisión, reportada por la empresa austriaca de petróleo y gas OMV, podría significar el cese de los últimos suministros de gas ruso a Europa.
El suministro de gas a OMV a través de Ucrania ya estaba en riesgo debido a un caso de arbitraje en curso contra Gazprom. Austria sigue siendo uno de los pocos países europeos que aún dependen del gas ruso, ya que muchos otros han reducido significativamente las importaciones tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia en 2022.
La suspensión de Gazprom detendrá el flujo de aproximadamente 7,400 megavatios hora por hora, lo que equivale a alrededor de 5 teravatios hora al mes. El acuerdo de tránsito actual entre Moscú y Kiev expirará a finales de año, y Kiev ha indicado que no renovará el contrato.
OMV declaró que se ha estado preparando para esta eventualidad y ha asegurado suministros de gas alternativos de Alemania, Italia y los Países Bajos. Sin embargo, los analistas advierten que esta interrupción podría agravar una crisis energética en curso en Austria, que ya enfrenta una recesión y una disminución de la demanda de gas.
La comisaria de energía de la UE, Kadri Simson, aseguró que todos los países de la UE que reciben gas a través de Ucrania tienen acceso a fuentes de suministro alternativas, enfatizando que no hay necesidad de continuar el tránsito de gas ruso.