Más de 100 personas han perdido la vida en Nepal debido a inundaciones severas y deslizamientos de tierra causados por fuertes lluvias en los últimos dos días. El gobierno nepalí ha ordenado el cierre de escuelas en las áreas afectadas durante tres días como medida de precaución, según Lakshmi Bhattarai, portavoz del Ministerio de Educación.
Las lluvias torrenciales han provocado que algunas regiones cercanas a la capital, Katmandú, reciban más de 30 centímetros de lluvia, lo que ha llevado a niveles de agua peligrosamente altos en el río Bagmati. También se han inundado importantes carreteras en todo el país, contribuyendo al aumento del número de muertos.
En este momento, el número de muertos asciende a 101, con 64 personas reportadas como desaparecidas, según Dan Bahadur Karki, portavoz de la policía. La situación sigue siendo crítica mientras continúan los esfuerzos de rescate para localizar a los desaparecidos y brindar ayuda a los afectados.
Esta catástrofe destaca la creciente vulnerabilidad de regiones como Nepal a eventos climáticos extremos, lo que genera preocupaciones sobre el cambio climático y la preparación para desastres a nivel global.