La Red Mundial contra las Crisis Alimentarias (GNAFC) ha publicado su informe anual, que revela un aumento preocupante de la inseguridad alimentaria aguda en todo el mundo. El informe destaca que los conflictos, la inestabilidad económica y las crisis climáticas siguen siendo los principales impulsores de las crisis alimentarias, y la situación en Gaza alcanza niveles críticos.
Según el informe, casi medio millón de personas en Gaza se enfrentan a condiciones de hambre catastróficas, y toda la población experimenta inseguridad alimentaria aguda. La situación se ha visto exacerbada por el cierre de los pasos fronterizos y las restricciones a la entrega de ayuda desde principios de marzo de 2025.
El informe de la GNAFC identifica varios países que se enfrentan a graves crisis alimentarias, entre ellos Sudán, Yemen y Malí. El informe pide una acción urgente de la comunidad internacional para abordar las causas profundas de la inseguridad alimentaria y proporcionar asistencia humanitaria a quienes la necesitan. La organización subraya la importancia de los esfuerzos coordinados para garantizar que la ayuda llegue a las poblaciones afectadas y para construir una resiliencia a largo plazo.