El 27 de septiembre de 2024, los países del G7 están finalizando un plan para destinar 50 mil millones de dólares a Ucrania, utilizando activos rusos congelados, según Bloomberg.
Estados Unidos ha prometido 20 mil millones de dólares para el paquete de ayuda, condicionado a que la Unión Europea (UE) ajuste su régimen de sanciones para garantizar ingresos predecibles de estos activos. Actualmente, las sanciones de la UE requieren aprobación unánime para las extensiones cada seis meses.
En respuesta a las demandas de EE.UU., la UE está trabajando en una propuesta para extender el período de decisión sobre el congelamiento de activos a cada 36 meses. Mientras tanto, el bloque ha sugerido contribuir con 35 mil millones de euros de su presupuesto si EE.UU. no participa.
La oposición de Alemania, Francia e Italia se ha manifestado contra el aumento de la contribución de la UE, mientras que Hungría ha propuesto posponer decisiones sobre activos rusos congelados hasta después de las elecciones presidenciales en EE.UU.
Se esperan propuestas finales del G7 durante una reunión el 25 de octubre de 2024. La ministra de Finanzas de Canadá, Chrystia Freeland, ha expresado optimismo sobre la iniciativa global para financiar los esfuerzos militares de Ucrania a través de estos activos.