El Reino Unido está experimentando una importante salida de residentes adinerados debido a los cambios en las políticas fiscales. La abolición del estatus fiscal de no domiciliado (no-dom), que ya ha entrado en vigor, es un factor principal de esta tendencia.
El régimen de no-dom, que había estado vigente durante más de dos siglos, permitía a los residentes extranjeros pagar impuestos solo sobre los ingresos obtenidos en el Reino Unido o repatriados. Esta reforma tiene como objetivo generar ingresos adicionales, con estimaciones que sugieren un aumento anual de varios miles de millones de libras. El estatus de "no residente" se concibió originalmente para los colonos que hicieron fortuna al otro lado del mundo y querían evitar impuestos hasta que trajeran su dinero a casa.
Aproximadamente 10.800 personas adineradas, incluidos centimillonarios y multimillonarios, abandonaron el Reino Unido en 2024. Los Emiratos Árabes Unidos, particularmente Dubái, se han convertido en un destino principal para aquellos que buscan ingresos libres de impuestos y opciones de residencia.