El Líder Supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, ha puesto a las fuerzas armadas del país en alerta máxima ante la preocupación de un ataque de los Estados Unidos, según un alto funcionario iraní que habló con Reuters el 6 de abril.
Irán ha enviado mensajes a países como Irak, Kuwait, Qatar, los Emiratos Árabes Unidos, Turquía y Bahrein, declarando que cualquier asistencia a un ataque estadounidense, incluido el suministro de espacio aéreo o territorio para las fuerzas militares estadounidenses, se considerará un acto de agresión contra Teherán y enfrentará "graves consecuencias".
Khamenei había rechazado previamente el llamado del presidente estadounidense Donald Trump a conversaciones directas, prefiriendo negociaciones indirectas a través de Omán, que históricamente ha servido como canal de comunicación entre las dos naciones, según el funcionario iraní. Tales conversaciones podrían comenzar pronto si Estados Unidos las apoya, agregó.
Abbas Araqchi, viceministro de Relaciones Exteriores de Irán, declaró que Irán está listo para entablar negociaciones sobre su programa nuclear y el alivio de las sanciones, enfatizando que Irán se mantiene firme en la protección de sus intereses nacionales y su soberanía. El presidente iraní Masoud Pezeshkian había declarado previamente que Teherán desea "negociaciones en igualdad de condiciones, sin amenazas".
A principios de marzo, el presidente Trump supuestamente envió una carta a las autoridades iraníes instándolas a participar en las negociaciones del acuerdo nuclear, estableciendo un plazo de dos meses, según Axios. Trump supuestamente amenazó a Teherán con "castigos históricos y bombardeos que nunca antes habían visto" si se negaban al diálogo sobre el programa nuclear.