Decenas de miles de ciudadanos en Turquía han estado protestando durante seis días consecutivos contra el arresto y destitución del alcalde de Estambul, Ekrem Imamoglu. El opositor Partido Popular Republicano (CHP) ha nominado a Imamoglu como su candidato presidencial, a pesar de su detención por cargos de corrupción y terrorismo.
El gobierno alemán ha expresado fuertes críticas a las acciones del liderazgo turco. Los partidos dentro de la coalición gobernante están calificando el arresto como una maniobra política del presidente Erdogan. El Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) también exige la liberación de Imamoglu, considerando su detención como un ataque a las elecciones libres en Turquía.
Las protestas en toda Turquía se han intensificado tras el encarcelamiento de Imamoglu. Se enfrenta a cargos de corrupción y apoyo al terrorismo, lo que niega. Figuras de la oposición han denunciado la situación como un golpe de estado, y el partido de Imamoglu, el CHP, ha expresado su preocupación por la eliminación de un rival clave del presidente Erdogan.