El sábado se produjeron enfrentamientos en Sofía, Bulgaria, entre la policía y manifestantes nacionalistas que se oponen al plan del gobierno de adoptar el euro.
La manifestación, que comenzó frente al banco central, vio a los manifestantes quemar efigies y arrojar proyectiles a la oficina local de la Comisión Europea, lo que provocó daños a la propiedad y heridas leves a los agentes de policía.
Los manifestantes, en gran parte partidarios del partido ultranacionalista Revival, exigen un referéndum sobre la adopción del euro, expresando su preocupación por los posibles aumentos de precios y cuestionando los datos económicos del gobierno.
Si bien el gobierno apunta a la adopción del euro para el 1 de enero de 2026, se enfrenta a la oposición y debe cumplir los objetivos de inflación. Bulgaria se unió a la UE en 2007 y ha experimentado inestabilidad política, con frecuentes cambios de gobierno.