El domingo 16 de febrero de 2025, Ucrania interceptó 95 drones durante un ataque ruso masivo nocturno. El asalto dañó la infraestructura en Mykolaiv, ubicada en el sur del país, y causó más daños en las regiones de Odesa, Kiev y Sumy.
Las fuerzas rusas lanzaron 143 drones, incluidos los modelos iraníes Shahed, junto con vehículos aéreos no tripulados señuelo y dos misiles balísticos dirigidos a Odesa desde Crimea, según informó la Fuerza Aérea de Ucrania. Si bien se interceptaron 95 drones en 10 regiones, 46 desaparecieron del radar sin causar daños.
En Mykolaiv, nueve drones fueron derribados, según Vitali Kim, jefe de la Administración Militar Regional. El ataque provocó daños en infraestructura crítica, cinco residencias de varios pisos y otros edificios civiles. Un hombre de 64 años resultó herido y algunos residentes no tienen calefacción central debido al incidente.
La Administración Militar Regional de Kiev informó que no hubo daños a la infraestructura crítica en la capital. Sin embargo, siete viviendas particulares y un almacén resultaron dañados en dos distritos de la región, sin que se informaran víctimas.
Las fuerzas rusas continuaron los ataques en regiones de primera línea como Kherson y Donetsk utilizando drones, bombas guiadas y artillería. En Kherson, dos policías resultaron heridos por explosivos lanzados desde un dron ruso, y una universidad, una escuela, un edificio de apartamentos y dos viviendas particulares sufrieron daños por ataques separados con drones y artillería. Las ciudades de la región de Donetsk fueron atacadas 11 veces el sábado, lo que provocó la evacuación de 59 residentes, incluidos ocho niños, a zonas más seguras.