El 14 de enero de 2025, Rusia experimentó su ataque de drones más significativo del año, con fuerzas ucranianas que supuestamente lanzaron más de 200 drones y cinco misiles ATACMS de largo alcance en doce regiones. Este ataque coordinado provocó el cierre temporal de operaciones en seis aeropuertos, incluidos Kazán, Kaluga, Saratov, Tambov, Ulianovsk y Penza.
En la región de Tatarstán, los drones atacaron una instalación de almacenamiento de gas licuado cerca de una planta química, provocando incendios. Las autoridades locales confirmaron que un tanque de gas se incendió, pero se extinguió sin que se reportaran heridos. En Saratov, se dañaron dos sitios industriales, lo que llevó al cierre de las escuelas para clases remotas debido a preocupaciones de seguridad.
Los informes indican que el ejército ucraniano utilizó aproximadamente 200 drones, principalmente del modelo Lyutyi, una variante del Bayraktar turco, junto con un número indeterminado de misiles. El gobernador de Saratov, Roman Busargin, señaló que Saratov y Engels fueron fuertemente atacados, resultando en una destrucción significativa.
En la región de Bryansk, se reportó un ataque combinado con misiles desde Ucrania, pero no se proporcionaron detalles sobre el tipo de proyectiles utilizados. El gobernador de Bryansk declaró que todos los objetivos fueron interceptados y que no se reportaron daños ni víctimas en la zona.