Un terremoto de magnitud 6,3 ocurrió el 5 de enero de 2025 en el océano Pacífico frente a las costas de El Salvador, afectando a los países vecinos Guatemala, Honduras y Nicaragua. El sismo se registró a las 11:18 hora local (17:18 GMT) y tuvo su epicentro a 29 kilómetros al suroeste de la Costa del Sol, a una profundidad de 33 kilómetros.
Los informes iniciales de las autoridades indicaron que no hubo víctimas ni daños significativos. El terremoto generó al menos 27 réplicas, con magnitudes que oscilaron entre 3,8 y 4,8, de las cuales 11 fueron sentidas por la población.
En Guatemala, el temblor se sintió en nueve de sus 22 departamentos, incluida la capital, pero los funcionarios informaron que no hubo heridos ni daños estructurales. La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres instó al público a mantener la calma y estar preparados.
Las autoridades hondureñas también informaron que no hubo víctimas ni daños, aunque los residentes de La Paz notaron la intensidad del sismo. En Nicaragua, el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales atribuyó el terremoto a la actividad tectónica entre las placas Cocos y Caribe.