Tel Aviv/Beirut - El Medio Oriente sigue inestable, ya que la fuerza aérea israelí ha llevado a cabo sus ataques más severos desde que entró en vigor el alto el fuego con Hezbollah, atacando numerosos sitios en el Líbano.
Entre los ataques, se destruyó una plataforma de lanzamiento que había sido utilizada para disparar cohetes hacia Israel solo unas horas antes. El Ministerio de Salud libanés informó al menos nueve muertes como resultado de estos ataques.
Estados Unidos ha advertido contra la sobreinterpretación de las violaciones del frágil alto el fuego entre Israel y el grupo militante libanés. El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, declaró: "Cuando hay un alto el fuego, naturalmente hay violaciones." Al mismo tiempo, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu anunció una respuesta militar "poderosa" a un ataque de Hezbollah en el norte de Israel, describiéndolo como una grave violación del alto el fuego.
Según fuentes militares, la fuerza aérea israelí atacó a terroristas, plataformas de lanzamiento y otras instalaciones asociadas con la milicia chiita pro-iraní. Estas afirmaciones no han sido verificadas de manera independiente.
Tanto Hezbollah como el ejército israelí se han acusado mutuamente de violar el alto el fuego. El presidente del parlamento libanés, Nabih Berri, acusó a Israel de numerosas violaciones, mientras que el ejército israelí afirmó que los actores en el Líbano deben frenar las actividades hostiles de Hezbollah.