LIMA, 25 de noviembre - Miles de mineros artesanales en Perú han iniciado protestas bloqueando caminos y acampando frente al Congreso, exigiendo una extensión de un programa que permite temporalmente sus operaciones. Este programa ha sido criticado por las autoridades por contribuir a la minería ilegal.
Un proyecto de ley del gobierno presentado la semana pasada al Congreso propone una extensión de seis meses para que los mineros formalicen sus actividades antes de que el programa actual expire el 31 de diciembre. Los mineros abogan por una extensión de dos años y una nueva ley para facilitar su proceso de formalización.
Desde la semana pasada, cientos de mineros han instalado tiendas cerca del Congreso, mientras que miles bloquean la principal carretera costera en las regiones del sur de Ica y Arequipa. Esto ha resultado en una congestión significativa del tráfico, con vehículos varados hasta cinco kilómetros.
El programa REINFO, que comenzó en 2012, proporciona permisos temporales mientras los mineros esperan su formalización. Actualmente, cuenta con 85,000 mineros artesanales registrados, de los cuales solo alrededor del 20% han alcanzado un estatus formal. Las autoridades y las empresas mineras privadas han informado que muchos mineros explotan este estatus temporal para operar en áreas restringidas sin cumplir con las regulaciones laborales o ambientales.
La producción de oro de Perú alcanzó 99.7 millones de gramos en 2023, marcando un aumento del 2.8% con respecto al año anterior. Se estima que las pequeñas minas artesanales representan aproximadamente el 40% de esta producción, aunque los grupos mineros afirman que la cifra se acerca al 50%.
Los manifestantes expresan frustración por la falta de atención del gobierno, con un minero declarando: "Estamos aquí durmiendo al aire libre y el gobierno no nos presta atención." La situación ha sido descrita como potencialmente volátil, con analistas advirtiendo sobre la escalada de tensiones entre el Congreso y los mineros en protesta.